El pasado doce de junio tuvo lugar la cena de final de bachillerato que me tocó realizar. Atrás dejamos buenos y malos momentos, muchos días compartidos con todos los compañeros. Compañeros con los que compartimos más días que con otros. Amistades nuevas, intercambio de opiniones y una fuerte unión por parte de todos. También es cierto que no todo han sido buenos momentos. Siempre recordaremos aquellas notas que se podían mejorar, aquellos profesores que según nosotros nos tenían manías. Y sin duda todo aquello vivido se reflejó en la noche del pasado día doce. Que, como en todos los eventos siempre hubo algún que otro imprevisto - como por ejemplo, que vino más gente de lo normal - la cena estuvo bastante bien, pero lo que realmente nos llegó a sorprender fue el buen ambiente de la gente que asistió, tanto por parte de los alumnos que por parte de los profesores. - Gracias a todos por vuestra asistencia -. Miradas, risas, anécdotas... todo eso se vio reflejado en dicha cena, la cual se animó mucho más cuando ciertos alumnos de segundo de bachillerato B pusieron música y nos hicieron bailar con ritmos creativos. Sin duda, fue una noche que no olvidaremos fácilmente, ya que la fiesta no acabó cuando se cerraron las luces del instituto, si no, que muchos siguieron celebrando el final de un ciclo de la vida en otros lugares que quedarán marcado en nuestras memorias.
Gracias a todos por estos buenos momentos.
sábado, 4 de julio de 2009
martes, 30 de junio de 2009
Los dieciocho, cómo se presentan?
En realidad, debería haber abierto este blog hace ya unos meses. Más en concreto, en abril. ¿Cómo se presentan los dieciocho? Se presenta con libertad. Dicen que la fiesta de cumpleaños, cuando cumples la mayoría de edad tiene que ser especial. Pues bien, la mía lo fue. La misma semana de mi cumpleaños cogí fiebre, me quedé sin voz y mi aspecto era horrible. Pero me hallaba en Madrid. Jamás había estado en esta ciudad y la verdad es que lo recuerdo como si fuera ayer. Nos encontrábamos en un Karaoke, cantando y a las 0:00 del día 2 de abril empezaron a cantar mis compañeras de viaje, el cumpleaños feliz. Me emocioné. Todos me felicitaron y como obsequio me pusieron una corona en la cabeza, en la que se podía leer ''FELICITATS'', que como deduciréis es felicidades en catalán. Cantamos y cantamos hasta que se nos hizo tarde para volver al Hostal Persal (publicidad subliminal).
Al llegar a casa, tuve una conversación con mis padres. Bueno, mejor dicho, con mi padre. Éste me dijo que él ya había cumplido como padre. Que ahora soy yo quien dirige mi vida. Que ya no tengo que pedir permiso cada vez que quiera hacer algo. Ahora soy yo quien decide las cosas, pero siempre avisando de lo que voy a hacer para que mis padres puedan saber dónde estoy. Más libertad... ese era el regalo más grande que me podían dar para mis dieciocho años. A partir de ahora todo será distinto.
Al llegar a casa, tuve una conversación con mis padres. Bueno, mejor dicho, con mi padre. Éste me dijo que él ya había cumplido como padre. Que ahora soy yo quien dirige mi vida. Que ya no tengo que pedir permiso cada vez que quiera hacer algo. Ahora soy yo quien decide las cosas, pero siempre avisando de lo que voy a hacer para que mis padres puedan saber dónde estoy. Más libertad... ese era el regalo más grande que me podían dar para mis dieciocho años. A partir de ahora todo será distinto.
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